Diciembre de 2010. Parada en Madrid de la Gira Internacional Monster Ball de Lady Gaga. Marcas de joyas internacionales y nacionales acuden raudas a la llamada de la cantante en un hotel. Comienza la venta privada. Entre los postores, Nicol?s y OhmyGod, joyería española de las hermanas Nicolás, cuya familia lleva diseñando desde 1945. En su muestrario, piezas en forma de serpientes, lagartijas y cocodrilos. Las españolas conquistan a Gaga y se llevan el premio. Una recompensa de varias gargantillas, brazaletes de animales y dos sortijas en oro blanco con diamantes cuyo precio medio supera los 200 euros.

"Esto sí que son joyas auténticas", recuerda que dijo Lady Gaga una de las responsables de OhmyGod. Y desde aquel momento, las colecciones basadas en animales o con motivos góticos como calaveras, muy acordes con el estilo extravagante de la cantante, se han convertido en las piezas más vendidas y demandadas de estas marcas. El anillo doble en forma de reptil ha pasado a llamarse Gaga`s snake y solo se vende por encargo con un plazo de entrega de dos meses, aproximadamente.

Estas adquisiciones son ahora parte del vestuario habitual de la cantante. "Suele llevar las joyas a diario y las saca en su blog", dicen en la joyería. "Después se ha vuelto a poner en contacto con nosotros y nos ha pedido más diseños, estos ya personalizados", cuenta una responsable.